Google ofrece dos reportes semanales sobre la movilidad de los usuarios en 120 países, incluyendo el Perú. Google utiliza la información de las personas que usan sus servicios, lo que permite que las autoridades tomen decisiones relacionadas al distanciamiento social que implica la propagación del COVID-19.
Los informes, que se publican martes y jueves, reúnen las tendencias de movilidad con la información de las 48 o 72 horas previas, comentó un vocero de Google a la Agencia Andina.
«Venimos trabajando para agregar países y regiones adicionales para garantizar que estos informes sigan siendo útiles para los funcionarios de salud pública de todo el mundo que buscan proteger a las personas de la propagación de COVID-19», indica.
Otro punto que dio a conocer fue que este recurso podría ayudar a los funcionarios a comprender los cambios en los trayectos y realizar las recomendaciones sobre horarios comerciales u ofrecer información para la oferte de servicios de entrega a domicilio.
«Las visitas constantes a los centros de transporte podrían indicar la necesidad de agregar autobuses o espacios adicionales para permitir que las personas que necesitan viajar se distribuyan para mantener el distanciamiento social. Finalmente, comprender no solo si las personas viajan, sino también las tendencias en los destinos, puede ayudar a los funcionarios a diseñar guías para proteger la salud pública y las necesidades esenciales de las comunidades», agrega.
Toda esta información proviene de los datos recopilados que los usuarios han habilitado el historial de ubicaciones para su cuenta, por ello representan una muestra.
Los reportes son públicos y está accesible para todo el mundo, tanto autoridades de salud pública, investigadores y personas interesadas.
Cada informe cumple con los estrictos protocolos y políticas de privacidad de Google.
A ello Google también colabora con un grupo de epidemiólogos selectos que trabajan en COVID-19 para ofrecerles actualizaciones a un conjunto de datos agregados y anónimos que puede usarse para comprender y pronosticar mejor la pandemia. Los datos de este tipo han ayudado a los investigadores a predecir epidemias, planificar la infraestructura urbana y de transporte público, así como comprender la movilidad y las respuestas de las personas ante conflictos y desastres.
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Fuente: Andina
